Adopción de Tona

Tona fue víctima de la dejadez y el abandono junto con sus compañeros. En menos de cuatro días nos hicimos cargo de 13 perros de caza, galgos y podencos de diferentes lugares y con diferentes historias, pero todos ellos con algo en común: el alma rota tras haber sido tratados como desechos, ojos llenos de pánico y tristeza. Tona fue uno de ellos. Llegó en mal estado y muy asustada. Poco a poco se va recuperando, y ganando confianza. Aun se muestra muy tímida, pero en su gesto y su mirada, vemos que desea acercarse… Cada día luchamos para que esa barrera caiga del todo y disfrute de otra versión del ser humano y, esperamos que pronto, de un buen hogar.